¿Es sostenible el modelo de usar y tirar en los envases? Más allá del reciclaje de residuos para la sostenibilidad de nuestro planeta, la pregunta es si este modelo de consumo es o no sostenible para nuestras ciudades y para nuestro planeta.
El incremento de los residuos, de la basura que generamos, ha ido en aumento en los últimos años. Pero ¿cómo se incentiva más el reciclaje?, vamos a comparar el modelo español con el que se utiliza en otros países de Europa donde se apuesta más por el retornable.
Porque el reciclaje no deja de ser un proceso que mejora el proceso ya de por sí improductivo, ya que supone la destrucción de un envase para convertirlo en otro nuevo, con el gasto que esto tiene añadido. Tenemos que recoger el producto del contenedor, llevarlo a la planta de reciclado para su separado y posterior tratamiento. Un proceso que sería más corto, rápido y económico si se apostara por el modelo de envases retornables.
¿Reciclar residuos o retornar envases?
El problema es que no le damos ningún valor al envase que tenemos, excepto algunas excepciones como el caso de los tapones utilizados para causas solidarias. Cada envase vale de media menos de un céntimo lo que no incentiva a que sea atractivo para el consumidor el reciclaje. Sin embargo en otros países tenemos otro modelo, donde el envase tiene de media un coste de 25 céntimos, lo que lleva a que los consumidores guarden el envase en sus hogares y luego lo lleven a puntos de retorno donde les devuelven el coste de dicho envase.
En países como Alemania tienen una cuota de retorno de reciclaje de 98% de los cascos de bebidas, tanto latas como vidrio o plásticos, mientras que en España con nuestro modelo de reciclaje, donde se grava con un cannon a todos los envases para sostener el modelo, aunque tenemos un buen índice cercano al 60%, aplicaciones para smartphones que nos ayudan a reciclar esto no supone un incentivo suficiente para la mayoría de los consumidores.
Pero esto no ha sido siempre así. En nuestro país hasta los años 80 fue común el sistema de retornables, donde se devolvía el casco del envase para recuperar otro, o se pagaba una parte por el contenido, por la bebida y por otro por el envase. En muchas industrias sigue siendo así. Un ejemplo claro es la hostelería donde los envases se recuperan y reutilizan constantemente. También tenemos otras áreas donde el envase tiene un valor importante, como por ejemplo las grandes garrafas de agua que se utilizan en muchas empresas.
Pero no se trata sólo de las ventajas para el consumidor, sino también para el reciclado. Al separar a través de la devolución de envases, se obtienen materias primas, los plásticos y las latas de manera mucho más limpia, lo que permite que su reciclar los residuos sea mucho más efectivo. De esta forma el producto final que se obtiene es mucho más limpio.
Es decir, fabricar nuevos productos con la materia prima que se obtiene del modelo de envase retornable es mucho más fácil y rentable, ya que la pureza del material de desecho tratado, además de ser más económico en su tratamiento, tiene un valor mucho más alto.
En muchas ciudades ya se están llevando a cabo estas iniciativas, donde reciclar basura y en retorno de envases no son incompatibles, permitiendo que cada ciudadano opte por el que quiera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario