Técnicos del Pincipado han matado a tiros este verano cuatro lobeznos de pocos meses de edad | Los conservacionistas defienden una gestión compatible con la ganadería y recuerdan que en Portugal el lobo está estrictamente protegido
Más de 110.000 personas han firmado durante las últimas tres semanas una carta dirigida a los gobiernos de Asturias y Castilla y León para expresar "la más enérgica protesta" por la autorización de cazar durante los próximos meses 140 lobos en Castilla y León y 50 ejemplares más de esta especie en Asturias. La campaña de recogida de firmas organizada a través de la plataforma Change.org por la asociación conservacionista Lobo Marley pretende "evitar la masacre de más de 190 lobos en Asturias y Castilla y León apoyada desde la Administración" asegurando que "en el siglo XXI ya no hay excusa para que nuestro lobo ibérico, Canis lupus signatus, no sea especie protegida en España, como ya lo es desde hace tiempo en Portugal".
Los promotores de la carta denuncian que los cupos para la caza de lobos "parecen aleatorios y destinados a satisfacer a grupos de presión que someten a la Administración a continuos chantajes para rendirles a sus exigencias". En este sentido, Lobo Marley solicita, "una vez más, los datos científicos, independientes y no sesgados, que sustenten sólidamente el aumento de dichos cupos de caza".
Los conservacionistas recuerdan que en Portugal, el lobo ibérico se halla estrictamente protegido "y tal protección se sustenta tanto en el apoyo de su gobierno como de la UE que dedica importantes fondos para su conservación".
La carta que protagoniza esta recogida de firmas solicita "el apoyo decidido de las diferentes administraciones en la conservación de una especie emblemática de la Península Ibérica como es el Canis lupus signatus; apoyando además el desarrollo de estrategias socio-económicas sostenibles basadas en el lobo y su cultura y tradiciones asociadas, con siglos de historia en toda la Península Ibérica".
Origen de la asociación conservacionista Lobo Marley
En agosto de 2012, trabajadores del Parque Nacional de Picos de Europa, amparados por la resolución administrativa de 2 de agosto de 2012 de la Consejería de Agroganadería del Principado de Asturias que ordenaba matar a seis ejemplares de lobo en el Parque Nacional de Picos de Europa, abatieron a un lobo que portaba un collar GPS colocado apenas diez meses antes, cuando todavía era un cachorro.
El animal era objeto de un seguimiento para estudios científicos. Aparte del coste económico del estudio (más de 300.000 euros) que fue pagado con dinero público, se especula con la posibilidad de que el animal abatido fuera localizado gracias al dispositivo que portaba, y su muerte sirviera para aplacar los cada vez más caldeados ánimos del sector ganadero, deseoso de marcar la política del gobierno regional asturiano poniendo al lobo en el punto de mira.
Este caso fue el tristemente conocido como Lobo Marley, origen de la asociación conservacionista Lobo Marley. Ciudadanos por el lobo y por el mundo rural, que preside el naturalista y divulgador ambiental Luis Miguel Domínguez.
Cuatro lobeznos sacrificados en Asturias este verano
Técnicos de la Consejería de Agroganadería del Principado de Asturias abatieron el pasado 27 de agosto cuatro ejemplares de lobo de menos de un año de edad en la zona de Picu Mofrechu, en Ribadesella. Fuentes del gobierno regional han indicado que "este tipo de actuaciones vienen reflejadas en el Programa Anual de Control del Lobo" y que en una de la últimas reuniones del "Comité Consultivo del Plan de Gestión del Lobo en Asturias -a la que, según la consejería, no asistieron los grupos conservacionistas- se expidió un informe favorable para el control poblacional del cánido en Ribadesella, Llanes y Cangas de Onís, donde este animal "genera una alta conflictividad socia".
Diversos grupos conservacionistas y ecologistas esta actuación afirmando que ser trata de "una una nueva matanza" que ha afectado en este caso a "cuatro lobeznos de apenas tres meses de vida". "Esta nueva actuación marca el estilo del Gobierno de Asturias en la gestión de las especies salvajes", critican las entidades conservacionistas.
Fuente original: lavanguardianatural
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