¡VUELVE LA VIDA! En un tiempo marcado por el cambio climático, la explotación insostenible de los recursos, problemas medioambientales y catástrofes naturales La Fundación Gabriele "hace escuela"

DEL DESIERTO AGRARIO AL VERGEL DE ESPECIES: LA GRANJA GUT TERRA NOVA, LA TIERRA DE PAZ DE LA FUNDACIÓN GABRIELE INTERNACIONAL

¿Qué hemos hecho del paisaje natural con nuestra agricultura convencional? Un campo tras otro en concentración parcelaria rentable.

Grandes extensiones de monocultivos que vulneran la biodiversidad natural y en la que a los animales silvestres sólo se les ve en raras ocasiones, pues allí donde se han hecho desaparecer las filas de setos y los árboles, a penas se escucha el canto de un pájaro, ni aparece animal alguno. Sobre campos pelados, donde no hay protección alguna, los animales silvestres no encuentran un espacio para vivir y si además se tratan a las plantas y al suelo con química, los animales simplemente pierden sus fuentes de alimentación.

La Fundación Gabriele Internacional ha comenzado a hacer revivir este desierto agrario. En una región alemana de la Baja Sajonia sobre un despoblado paisaje se fueron plantando setos, metro tras metro, se reforestaron islas de árboles y zonas boscosas, se crearon biotopos de piedra,  biotopos acuáticos, terrenos a su libre albedrío. Los setos de Benjes protegen a las reforestaciones y cultivos biológicos y con los nuevos setos fueron regresando también muchas especies animales.

En el año 2010 la Fundación Gabriele Internacional hizo un recuento de las especies encontradas con resultados excelentes y que sobrepasan todas las expectativas:

Aves

En los eriales estudiados se pudieron encontrar hasta 88 especies diferentes de aves, de las cuales 69 son aves nidificantes, 11 son aves en busca de alimento y 8 aves de paso. En la lista de aves en peligro de extinción de Baviera encontramos los nombres de 21 especies aquí afincadas.

El profesor en ornitología Berthol, que fue director por ornitología del instituto alemán Max Planck en su evaluación escribió lo siguiente: La avifauna de la granja Terra Nova, en consideración a la diversidad de especies y a la población de las mismas, al menos en Alemania es única en su género, posiblemente en toda Europa central.

«Entre las aves que han anidado y habitan esta reserva natural se encuentran 88 especies de pájaros y 21 de ellas están el la lista de en peligro de extinción. ¡No es esto todo un tesoro en Baviera?!» – apunta el profesor Berthold, ornitólogo especializado de la Universidad de Max Blank en Alemania. Y sigue diciendo – «Aquí se encuentran hasta 27 Zarzeras! Para encontrar tantos pájaros de esa especie me tengo que recorrer por lo menos medio paisaje del lago Constanza, porque estos setos de esta manera no existen ya, como los hay aquí. ¡Realmente esto es algo excepcional!»

Mariposas

Jochen Walz, ecólogo diplomado en geografía y experto en mariposas, escribió lo siguiente en su informe: Con un total de 50 diferentes especies de mariposas, de las cuales 22 se encuentran en la lista de mariposas en peligro de extinción en Baviera, la población de mariposas es de elevado valor.

Debido a las condiciones naturales de los terrenos es de esperar a largo plazo un constante aumento de especies y de individuos por especie. (...)

Por ello, este terreno es de gran valor científico, ya que este proceso debería de ser documentado, y el terreno debería de servir de modelo para otros proyectos de renaturalización.

Pero también los biólogos y entomólogos han descubierto una gran variedad de especies. «Tan solo en Mariposas se han encontrado a 42 especies diferentes, lo que corresponde a un alto número de especies de mariposas» – apunta el entomólogo Jochen Walz- «Yo me sorprendí bastante porque esta zona era antes un simple paisaje agrario, es decir solo pastizales de campos agrícolas. Y si en Alemania se va a nuestros campos agrícolas encuentras como máximo 5 especies de mariposas, las especies mas frecuentes que hay por acá, pero que de todas maneras encuentras con muy poca densidad de población, quizás te encuentras con una mariposa por Km. Pero encontrarse aquí con 42 especies, es algo grandioso. Y los motivos de ello son evidentes cuando se sabe como se cultiva aquí, y la riqueza extrema de los setos, porque prácticamente cada parcela esta rodeada de un seto, luego unida a pradera de hierba que tienen una anchura de metro y medio o dos metros. Y naturalmente encuentras una gran variedad de estructuras y con ello una enorme variedad de plantas e igualmente de mariposas. Es decir que con toda seguridad esta zona se gana la condición de Parque Natural Protegido, eso sí que esta claro.»

Murciélagos

En la Tierra de la Paz han podido ser localizadas 9 especies diferentes de murciélagos, 7 de estas especies de murciélagos son muy poco frecuentes y son especies protegidas en extinción. 

Max Jakobus, diplomado en biología escribió lo siguiente en su evaluación: Todas las especies de murciélagos forman parte de las especies altamente protegidas según las leyes alemanas de protección de la naturaleza. Tres especies de las que han sido encontradas en el terreno examinado son especies que están recogidas en en anexo II de las directrices europeas de Fauna Flora Habitat (FFH): el murciélago de Bechstein, el murciélago ratero y el murciélago de bosque. Estas especies son de interés común y para cuya conservación han de ser respetadas ciertas zonas protegidas. El terreno examinado, con su variedad de hábitats es un espacio ideal para que puedan vivir los murciélagos.

La reparación de la naturaleza y los animales ya ha comenzado. Y esta es la meta de la Fundación Gabriele Internacional con sus miembros del consejo y representantes en más de 30 países en este mundo.

Muchos amigos de la naturaleza y organizaciones del medioambiente en todo el mundo dirigen su atención en esta preciosa tierra que se encuentra en el corazón de Alemania y que ahora es amenazada por la construcción de un proyecto de carreteras.

Justamente en un tiempo en que está marcado por el cambio climático, por problemas medioambientales y catástrofes naturales, la Fundación Gabriele “hace escuela” a nivel mundial y muestra aquí una alternativa y una solución que está siendo realizada igualmente en muchos lugares del mundo, porque demuestra que esta funcionando. Las personas van aprendiendo a valorar y conservar el medio ambiente y a fomentar un nuevo trato con la naturaleza y los animales. Tu voz es importante y de una gran ayuda. Por favor PINCHA AQUI PARA FIRMAR y colabora con tu firma. Porque este es el comienzo de un nuevo tiempo.

¡VUELVE LA VIDA!

Espacios vitales en el sistema de biotopos conectados entre sí

Un biotopo es la unidad de espacio más pequeña en la ecología del paisaje. De acuerdo con su significado, la palabra «biotopo» quiere decir tanto como «lugar de vida». En nuestro mundo civilizado, estos espacios vitales para plantas y animales han ido desapareciendo cada vez más debido al secadío de terrenos, a la industrialización y a la agricultura intensiva. La disminución de las especies es cada vez mayor, la lista de especies en peligro de extinción no para de crecer. En esto no sólo juega un papel de forma creciente la pérdida de superficies de espacios vitales, sino también el aislamiento de los distintos biotopos. Se va arrinconando a los animales para que vivan en islas pequeñísimas, las posibilidades de buscar comida, de reproducirse o de invernar son muy limitadas. Por esta razón, con la enmienda de la Ley federal alemana de protección de la naturaleza del año 2002, se obligó a los Estados federales a «crear una red de biotopos conectados entre sí, que abarque por lo menos el diez por ciento de su superficie» (BNatSchG, §3 - Párr. 3 de la Ley federal alemana de protección de la naturaleza). 

En la Tierra de la Paz, creada por la Fundación Gabriele Internacional, esta exigencia de la Ley federal alemana de protección de la naturaleza es ya una realidad: Se ha construido un gran sistema de biotopos conectados entre sí a base de setos, de trozos de bosques, de biotopos húmedos y de piedras – ¡y la vida está empezando a volver!

Setos de árboles y de Benies

Tan pronto como se hace un seto de Benies (llamado así en consideración al apellido de su creador, Heinrich Benjes) con ramas secas, para plantar en él arbolitos y arbustos, ya al día siguiente llegan los pájaros a sentarse en las ramitas. Y no sólo ellos se alegran por cada nuevo seto: liebres, erizos, tejones, zorros, innumerables tipos de insectos, mariposas, escarabajos, abejas, todos ellos encuentran allí espacio vital, protección y alimento. También a lo largo de los setos pueden atravesar los campos animales asustadizos, como por ejemplo los corzos, y pasar bien protegidos de un terreno boscoso al otro. De este modo, los setos comunican diferentes espacios vitales y cumplen una función muy importante en el sistema de biotopos conectados entre sí.

Biotopos húmedos

En las últimas cinco décadas ha desaparecido entre el 70 y el 80% de las denominadas aguas quietas, con fatales consecuencias: muchos tipos de libélulas y anfibios están amenazados de desaparecer. Los animales que viven al aire libre, como los corzos o los pájaros, tienen que recorrer a menudo largas distancias para saciar su sed. Por este motivo, los biotopos húmedos que se han construido en la Tierra de la Paz son una verdadera bendición para los animales. Los patos silvestres, los pájaros, insectos y anfibios tienen nuevamente un lugar para vivir, y quien en la estación estival se sienta a descansar en un banco al borde de un biotopo húmedo, o humedal, se podrá alegrar de ver el vuelo y de escuchar el zumbido de las libélulas, el croar de los sapos y de ver con qué alegría graznan allí los patitos.

Biotopos de piedras

Los biotopos de piedras son las terrazas en que las lagartijas y las mariposas toman el sol. También a los mamíferos pequeños, como los ratones y las comadrejas, les encantan las piedras amontonadas que ofrecen tantos escondites y concavidades.

En la estación fría, los animales encuentran en estos huecos refugios libres de heladas. Por ejemplo, los sapos y las ranas han instalado aquí su cuartel de invierno. 

Para los biotopos de piedras, en la Tierra de la Paz se emplea una clase de roca natural de esta región, llamada cal de conchas.

Terrenos de sucesión

En la Tierra de la Paz, los terrenos llamados de sucesión –que son suelos en que viven grupos de plantas de acuerdo a las leyes que rigen en la naturaleza– están totalmente abandonados a sí mismos: No se les siembra, ni siega ni riega. Así se van poblando poco a poco de hierbas y arbustos que se sienten a gusto en el lugar que les corresponde. Con los años los arbustos crecen, el terreno se llena de matorrales y todo se convierte en un «bosque previo». Lentamente se va transformando finalmente este bosque previo en un bosque verdadero: Aparecen arces, robles y hayas. Muchos animales se alegran por estos terrenos de sucesión: innumerables insectos juguetean, los pájaros encuentran suficientes semillas en la hierba y en los arbustos, las liebres tienen su espacio vital y las ardillas entierran aquí sus reservas para el invierno.

Regiones boscosas

El bosque es un lugar de refugio para todos los animales que también se sienten en casa en los sistemas de biotopos conectados, como los erizos, las martas, los tejones, las liebres, los jabalíes y los corzos. Y a los pájaros les encanta dar todos juntos un concierto en la copa de los árboles. En los bosques de la Tierra de la Paz se han instalado por todas partes comederos y casetas de anidar para los pájaros, así hay alimento para todos.

Orilla del terreno y franjas de flores

A lo largo de cada seto en el sistema de biotopos conectados entre sí se extiende una franja con flores y hierbas, en parte plantados especialmente para contribuir a la variedad de insectos. Aquí revolotean muchos tipos de abejas silvestres, los coleópteros y mariposas más variados. Estos animalitos no sólo multiplican la diversidad de especies, sino que también impiden la acción de los parásitos en los terrenos. Estas franjas con hierbas y flores son también muy apreciadas por los animalitos que incuban en el suelo, como las alondras. Allí pueden criar a sus crías, protegidas por todo tipo de hierbas, gramíneas y flores.

Florestas

Las florestas que han sido plantadas en las cercanías de los setos, se han transformado en pocos años en bosquecillos, en los que los animales que viven en libertad encuentran protección y amparo. Estos plantíos en la Tierra de la Paz constan de una gran variedad de árboles y arbustos, que por su parte cobijan a múltiples huéspedes pequeños. Se han plantado tilos, cerezos, robles, hayas, fresnos, serbales y espinos, combinados con una capa protectora de ciruelos espinosos, saúcos, rosas silvestres, espinos amarillos o avellanos. Aquí se ve a muchas ardillas y pájaros del bosque, como trepadores azules, agateadores, tórtolas o tórtolas turcas...

Terrenos baldíos

En la Tierra de la Paz, los terrenos baldíos en el cultivo pacífico de la tierra son una parte muy importante en el sistema de biotopos conectados entre sí. Los campos que están entre los setos, tienen cada tres años un año de barbecho para regenerarse. En parte se siembran mezclas de hierbas con alfalfa, mostaza, pacelia, alverjas y guisantes, que restituyen el suelo. En estas superficies, por lo general muy coloridas, zumban en el verano innumerables abejas. Mariposas como los macaones o cola de golondrina, las ajedrezadas y muchas limoneras y azuladas revolotean danzando por encima, y los pájaros picotean sacando las semillas que más les gustan.

Fuente: Fundación Gabriele Internacional